AL KOSTAT


Ronda Sant Antoni, 41, Principal
Teléfono+34 93 207 61 15
Esta semana fui a comer al restaurante AL KOSTAT, del chef Jordi Vila. Justo al lado de su restaurante gastronómico Alkimia y encima de la fabrica de Moritz, que el asesora, junto el Bar Velódromo, que yo sepa no lleva más cosas.
Cuando hablo de algo o de alguien, siempre lo escribo desde mi prisma y con el cariño, que es el objetivo que me he marcado, en este blog y hablar de Jordi Vila, es hablar de un chef talentoso que esta en un nivel de madurez culinaria muy grande.
Pero también tengo que decir que he comido y lo conozco, no en persona, pero si su trayectoria, cuando abrió su Alkimia cerca de Sagrada Familia. La primera vez que comí, no me gusto mucho, la segunda regular y cuando abrió el nuevo Alkimia, donde esta actualmente, flipe en colores. Para mi entender, esta entre los mejores de Barcelona, en el top cinco sin lugar a dudas y como digo esta a un nivel de sabiduría culinaria enorme. Con una personalidad y una línea gastronómica, que me parece muy raro que no sea más mediático. Realmente podría hablar también del Alkimia, pero lo dejare para otro post, porque hoy me quiero centrar en comentar su restaurante más casual, donde tiene un buen apartado de brasa, de platillos y de arroces, que no dejara indiferente a nadie.
Me hubiera encantado probar los arroces, porque tenían una pinta increíble, pero con lo que he comido hoy , era más que suficiente y otro día iré a comer un arroz , una carne o un pescado a la brasa, que como digo aunque no lo he comido, he visto otras mesas y parecía todo buenísimo.
Todo estaba buenísimo lo que he probado, cosas sencillas, pero impecablemente ejecutadas. Cosas como unos calamares rebozados, unas croquetas o un flan que rozaban lo sublime, por no hablar de los fuera de carta como los ceps con panceta a la brasa, espectacular, con un precio algo elevado (26€), pero si quieres buen producto hay que pagarlo.
Mención a parte han sido las croquetas como si fueran una ensalada cesar, yo que soy croquetero y he comido muchas. Hacia años que no comía unas tan buenas, con esa cremosidad y ese sabor, además de que, con la lechuga envuelta y el parmesano rallado, le daba un punto muy curioso.
AL KOSTAT, es un sitio para comer muy bien y dependiendo de lo que pidas a un precio bastante razonable, Además el local es precioso. Jamás pongo fotos del local, pero es tan bonito el pase y su techo pintado que vale la pena verlo.
A continuación, pongo fotos del local, las olivas de aperitivo, la croqueta cesar, los calamares, los macarrones gratinados, los ceps con panceta y el flan con helado de leche.












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